Las cremas, lociones y sérums antienvejecimiento suelen ser eficaces para ralentizar y prevenir la formación de arrugas, pero resultan ineficaces a la hora de eliminar las arrugas profundas ya existentes.
Los nuevos métodos de tratamiento que han surgido como resultado de los avances en la cirugía plástica han demostrado su eficacia en la lucha contra los signos del envejecimiento. Los rellenos dérmicos, que se inyectan bajo la piel para rellenar y alisar las arrugas, son el método de tratamiento más común. Los rellenos dérmicos se pueden utilizar tanto en el rostro como en las manos, junto con el método de rejuvenecimiento cutáneo con láser. De este modo, el rostro y las manos lucen la misma edad.
Los rellenos dérmicos son un tipo de tratamiento no permanente, por lo que es necesario repetirlos varias veces para mantener sus efectos. Además, cuando se aplican en pieles muy flácidas, su eficacia es menor en comparación con otros tratamientos. En estos casos, el lifting facial es una opción más adecuada.
En la cirugía estética actual, uno de los rellenos dérmicos es el relleno de ácido hialurónico.

¿Qué es el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico, otra alternativa al colágeno y el relleno dérmico más común, también se utiliza para tratar las arrugas y líneas de expresión del rostro. El ácido hialurónico está compuesto por ácido hialurónico equilibrado, biodegradable y de origen no animal. Este ácido se encuentra de forma natural en la piel y le aporta volumen y tersura. Con la edad, la cantidad de ácido hialurónico en la piel disminuye y los signos de envejecimiento se hacen más evidentes. La razón por la que las inyecciones de ácido hialurónico son tan eficaces en el tratamiento de la piel es que aumentan el nivel de ácido hialurónico en la piel. El ácido hialurónico se expande al absorber la humedad del entorno, por lo que, cuando se inyecta, tiene un efecto rellenador y alisa las líneas y arrugas.
¿Cuáles son las características del relleno facial con ácido hialurónico?
Las inyecciones de ácido hialurónico tienden a mantener su efecto durante más tiempo que las inyecciones de colágeno. En general, el efecto de las inyecciones de ácido hialurónico dura entre 6 y 12 meses. De este modo, no es necesario repetir el tratamiento con tanta frecuencia para mantener su eficacia. Además, el ácido hialurónico hidrata la piel y la rellena desde el interior, por lo que ofrece resultados más naturales que el bótox o algunas operaciones de lifting facial. Esto hace que el ácido hialurónico sea un tratamiento preferido, especialmente para rellenar los labios, suavizar las líneas nasolabiales y corregir el aspecto y el contorno del mentón.
Otra ventaja del ácido hialurónico es que no es un producto de origen animal. Por lo tanto, no provoca reacciones alérgicas, como puede ocurrir con las inyecciones de colágeno. Por la misma razón, no es necesario realizar pruebas de alergia ni de piel antes del tratamiento.
Sin embargo, el tratamiento con ácido hialurónico es un poco más doloroso que las inyecciones de colágeno, por lo que suele requerir anestesia local. Esto puede encarecer relativamente el precio del tratamiento.
¿Cómo es el cuidado de la piel después del tratamiento?
Durante los días posteriores al tratamiento, es posible que su rostro se vea un poco hinchado y enrojecido, y que las zonas de inyección le duelan ligeramente. Durante este tiempo, debe mantener la piel lo más limpia posible para reducir el riesgo de infección. Para combatir el enrojecimiento, puede aplicar aceites naturales antiinflamatorios en el rostro. Se sabe que el aceite de emú es eficaz para este fin.
A largo plazo, su objetivo debe ser mantener la cantidad de ácido hialurónico en la piel lo más alta posible. El ácido hialurónico puede ser degradado por la enzima hialuronidasa presente en la piel. Si puede evitar que esta enzima descomponga el ácido hialurónico, los efectos de la inyección durarán mucho más tiempo. Una forma de hacerlo es utilizar cremas faciales que contengan extracto de Phytessence Wakame. Este extracto, obtenido de un alga marina japonesa, ayuda a mantener la cantidad de ácido hialurónico en la piel al reducir la actividad de la hialuronidasa. Este extracto también se puede encontrar con los siguientes nombres: Undaria pinnatifida, alga wakame, extracto de alga marrón japonesa, fucodian o fucoxantina. Además de este método, también puede mantener la cantidad de ácido hialurónico en su piel en un nivel determinado tomando suplementos de ácido hialurónico.