En general, nuestro cuerpo presenta una asimetría. Por ejemplo, uno de nuestros pies es mucho más grande que el otro. Recuerde que, por lo general, los zapatos solo le quedan bien en un pie. Esta asimetría se puede encontrar en muchas partes de nuestro cuerpo. A veces, esta asimetría puede alcanzar proporciones molestas y requiere intervención.

La asimetría en los senos también puede resultar molesta en ocasiones. Por lo general, la asimetría mínima que se encuentra en nuestros senos a veces pasa desapercibida, pero en otras ocasiones se convierte en un problema que nos causa gran incomodidad en nuestra vida social.
La asimetría mamaria, que afea considerablemente la estética del escote y, además, provoca diversas alteraciones en la columna vertebral, no es algo que se corrija por sí solo, sino que requiere intervención quirúrgica. Si usted también se siente molesta por esta situación, hable con su médico sin demora.
¿Por qué se produce la asimetría mamaria?
La asimetría mamaria también puede aparecer después del parto. Si el bebé se alimenta solo de un pecho, uno de ellos puede caerse y perder volumen, mientras que el otro permanece más grande y voluminoso.
¿Cómo se realiza la cirugía estética para corregir la asimetría mamaria?
Si hay una pequeña diferencia de tamaño entre los dos senos, se puede corregir la asimetría mamaria colocando una prótesis en el seno más pequeño.
Si ambos senos son grandes, pero uno es mucho más grande que el otro, y la persona desea tener unos senos un poco más pequeños, se pueden reducir ambos a la vez. La asimetría se corregirá mediante una reducción ajustada al tamaño de cada seno.
Si la diferencia entre los dos senos es muy grande, es decir, si uno es muy grande y el otro muy pequeño, para corregir esta asimetría de la forma más saludable posible, es necesario aumentar ligeramente el tamaño del seno más pequeño y aumentar el otro hasta que ambos tengan el mismo tamaño.