En mis obras de escultura y pintura, intenté abstraer la anatomía viva diferenciándola. En mis obras de escultura de retratos y figuras, obtuve diferencias de imagen en las profundidades de la luz, lo que me produjo emoción. Obtuve formas como la nariz y estudios corporales en mis abstracciones faciales. Los colores de mis pinturas entraron en mis obras escultóricas. Esto me permitió conseguir una luz difuminada. El infinito haz de luz en el mar o en las profundidades del ojo se reflejaba en mis esculturas. Sentí el infinito y el vacío dentro de mis esculturas. Vi una profundidad infinita de luz integrada en mis esculturas. Por ejemplo, las personas sentadas en el agua o los retratos de pie en el aire empezaron a aparecer en distintas direcciones desde todos los lados. Estos colores en mis cuadros se convirtieron en figuras abstractas en la superficie. Los colores como la luz blanca de la luna añadían profundidad. Los colores se convirtieron en figuras abstractas en mis pinturas y esculturas. Las narices, las caras y los cuerpos de mi profesión de cirujano estético se integran con distintas imágenes en estas obras.